Finanzas

ALGUNAS CONSIDERACIONES SOBRE LA VALORACION DE EMPRESAS.

Pues principalmente hay que retener cuatro ideas muy claras:

I. Es necesario conocer lo que vale nuestra empresa. La obligación de todo gestor y de todo propietario es conocer la creación de valor que genera su negocio. Las decisiones empresariales contribuyen a crear o destruir valor para el accionista.

Dedicamos muchas horas y sacrificios de gestión como para renunciar a conocer cuál es el valor de la empresa.

II. En la valoración de empresas no caben posturas dogmáticas.

Al margen de su naturaleza de ciencia o de arte, parece necesario aproximarse a cualquier valoración con un espíritu crítico. No caben posturas dogmáticas y tampoco planteamientos absolutamente relativistas. Hay que sacar provecho de la metodología científica y el saber doctrinal.

Además, hay que saber interpretar los distintos métodos de valoración, ya que existen múltiples aristas que condicionan cualquier opinión.

III. Conviene asesorarse por un tercero independiente.

Cualquier valoración debe realizarse desde cierta distancia. Si somos juez y parte de la valoración, el componente subjetivo de la misma se incrementa exponencialmente. Es necesario apoyarse en asesores independientes que aporten metodología y experiencia y también profesionalidad, objetividad e independencia.

IV. El valor de la empresa fluctúa con el tiempo.

Ya hemos dicho que la empresa es un ser vivo. Por ello, cualquier decisión empresarial como subir precios, reducir costes, invertir en activos industriales o ampliar mercados y productos tienen implicaciones más tarde o temprano en el valor de la empresa.

Su obligación como gestor y/o accionista es incrementar el valor de las acciones de su empresa. Y toda su dedicación está dirigida a ese fin.

No se olvide cada cierto tiempo de medir el valor de su empresa. Probablemente sea uno de los indicadores de gestión más eficaces y a menudo más olvidados por gestores y empresarios.

Confiamos que estas notas le hayan ayudado a entender la filosofía que subyace en la valoración de empresas.

Esperamos haber contribuido también a desnitrificar un mundo muchas veces anbiguo y confuso. Por lo demás, le deseamos, toda la suerte en su aventura empresarial que consume cantidad ingente de recursos y energías de usted y de las personas que a su alrededor le ayudan a sacar adelante su proyecto.